viernes, 22 de febrero de 2008

Ludovico Einaudi (Turín, 1955)



Le onde

Turinés de nacimiento, Ludovico Einaudi es un compositor y pianista italiano que un buen día decidió empezar a componer para él mismo y empezar a tocar sus propias composiciones, después de notar como le producía una profunda insatisfacción escuchar las interpretaciones que otros músicos hacían de sus partituras. Eso no es nada extraño a nada que nos acerquemos al universo musical de Einaudi, en el que prima la sensibilidad, la belleza en su más alta expresión, con una música profundamente evocadora, de esa que hay que escuchar con exquisita atención para que las imágenes se vayan construyendo en nuestra mente, mientras las notas nos acercan a fronteras más allá de las cuales no sabemos lo que nos espera con exactitud, pero sí sabemos que va a ser de una belleza impactante.



Giorni dispari

Empezó a tocar el piano con 6 años animado por su madre, también pianista, y ahí dio comienzo una carrera de largo recorrido que le ha llevado a explorar distintos universos sonoros, para quedarse, como él mismo reconoce, con aquella música más pegada a la tierra, al folklore y la música popular lo que le abre a toda la dimensión de eso que se conoce como músicas del mundo. Un ejemplo palmario de eso está en su disco Diario Malí (2006), en el que colabora con el músico de ese país africano, Ballaké Sissoko, un virtuoso de la kora (una especie de arpa de 21 cuerdas), estableciendo un diálogo de una riqueza maravillosa entre ambos instrumentos.



Oltre mare

Aunque rechaza las etiquetas que se suelen aplicar a su música, se queda con la de minimalista cuando se utiliza para definir algo elegante, sincero. Lo cierto es que eso le va como anillo al dedo a una música de elegancia prístina, de sinceridad profunda y capaz de crear un oasis de tranquilidad y meditación en medio del caos, el ruido y la velocidad que nos rodea.

Discografía: Time Out (1988), Le Onde (1996), Stanze (1997), Fuori dal mondo (1998), Eden Roc (1999), I giorni (2001), Dr. Zhivago (2002), La Scala Concert (2003), Una mattina (2004), Diario Mali (2006), Divenire (2006).

“Cuando compongo, necesito improvisar pero también meditar mucho tiempo sobre lo que escribo. Progreso en dos niveles aparentemente opuestos: un primer proceso creativo, en una gran diversidad de estilos, y en un estadio posterior, lo reviso todo con un oído racional”.



Inizio

5 comentarios:

Anónimo dijo...

No conocía a este gran pianista italiano que me imagino fue un niño prodigio de la mano de su madre iniciándose en el arte, porque cuando lo he escuchado me parece un artista de corte clásico pero novedoso a la vez, ya que es capaz de integrar cualquier tipo de música sin saber de qué época es.
Según él mismo dice:
“Cuando compongo, necesito improvisar pero también meditar mucho tiempo sobre lo que escribo. Progreso en dos niveles aparentemente opuestos: un primer proceso creativo, en una gran diversidad de estilos, y en un estadio posterior, lo reviso todo con un oído racional”.
La improvisación en el mundo del arte, personalmente creo que es imprescindible para poder desarrollar a posteriori algo interesante y valioso.
También la racionalidad o el espíritu autocrítico son fundamentales para un artista. No me gusta la soberbia ni el autobombo que suelen darse algunos artistas.
Besos multicolores y buen finde!!

Alfredo dijo...

MILAGROS: Ludovico Einaudi es uno de los grandes compositores e intérpretes contemporáneos. Sobre la base clásica, como muy bien dices, añade elementos novedosos, y el disco con el músico de Mali es impresionante.

Te animo a que los sigas escuchando porque merece la pena.

Abrazos :))

MARIANA dijo...

Descubrir esta belleza en estado puro me vuelve muy agradecida a tu blog. Saludos.

MARIANA dijo...

Descubrir esta belleza en estado puro me vuelve muy agradecida a tu blog. Saludos.

Alfredo dijo...

BUSCANDOLUNAS: Este es uno de mis músicos de referencia, y siempre es agradable encontrarse con alguien que comparte ese gusto.

Gracias y saludos.