miércoles, 2 de mayo de 2007

Happy Birthday, Miss Monroe

Cuando la supuesta realidad nos empuja alegremente al abismo y el mundo se sumerge en una espiral de manipulaciones cotidianas, la opción de la locura adquiere el mayor de los vigores. Cuando el día a día se transforma en prolongada noche, los recovecos de la mente hierven ideando una escapatoria instantánea. Cuando la ausencia de un futuro escalda a los bienpensantes, los que no piensan –ni bien ni mal- reivindican el pasado que nunca fue. Cuando los ídolos de barro, los mitos de cartón piedra y las esperanzas prefabricadas hacen aguas en el desierto del Primer Mundo, se abre paso la religión de un Séptimo Arte mesiánico. Cuando el baile de máscaras global oculta nuestras verdaderas intenciones, una sonrisa desquiciada sirve de refugio a los que abandonan. Cuando finaliza el rodaje de la vida, la muerte reivindica su dirección. Es entonces cuando todos podemos ser –o no ser- Marilyn.

Ese es el texto que el grupo gijonés Konjuro Teatro incluye en el programa de Happy Birthday, Miss Monroe, su último montaje hasta la fecha, sobre un texto de Jorge Moreno (también director del montaje y actor) que fue galardonado el año pasado con el Premio Carlos Arniches, que se falla en la localidad de Alicante.

A lo largo de su andadura, Konjuro Teatro se ha venido consolidando como una de las "apuestas seguras" del teatro asturiano, con una serie de espectáculos puestos en pie con dignidad, y con textos que se apartan un tanto de los habituales en el resto de grupos. La referencia de Jorge Moreno como uno de los mejores, sino el mejor, dramaturgos de la región y también como uno de nuestros mejores actores, es fundamental para analizar la trayectoria de Konjuro Teatro.

Happy Birthday… plantea la disolución de las fronteras entre locura y normalidad, en momentos de contornos difusos, y en los que los presuntos cuerdos parecen más desquiciados que los enfermos a los que se supone que tratan de ayudar. También es un texto sobre la hipocresía, la traición y sobre como somos capaces de dejar en la cuneta a las personas si con eso obtenemos un oropel que, por un instante fugaz, nos saque del anonimato camino del altar efímero de una fama conseguida a costa de los otros.

Todo eso, y algo más, oculto bajo un texto aparentemente amable, pero que oculta una gran carga de profundidad, donde predomina el tono de comedia, y una ingenuidad muy en consonancia con la que se otorgaba al personaje de Marilyn (bajo el que se ocultaba una persona llamada Norma Jean que tal vez nunca nadie se esforzó en conocer), que terminó por fagocitar a la mujer real más por imposición externa que, probablemente, por elección personal. Eso que muchas veces nos pasa a todos, cuando por la mañana nos ponemos la máscara, trágica o cómica, con la que nos enfrentamos a la vida y nos relacionamos, o no, con los demás, en un debate interminable y quien sabe si irresoluble entre ser o no ser.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola, muy agradecida, por la visita, que no intromisión. Seas bienvenido a nuestro humilde blog. Y sí, para mi todo lo que tiene que ver con Bunbury es directamente especial. Siento una atracción especial por este gran músico y su personalidad. Soy fan de Heroes (iré al concierto del 12 de octubre) y de Bunbury en solitario, del que he disfrutado en varios conciertos también.

Invitarte siempre que quieras a opinar a ti y a tus visitantes a "Crema de estrellas": www.ennuestraconstelacion.blogspot.com

Amelia

Anónimo dijo...

Ahhh, y muy buen blog, muy interesante. Te linkeare desde "Crema de estrellas" Saludos

Alfredo dijo...

Gracias por la visita y te devuelvo cortesía de enlace y espero que el día 12 te lo pases genial en el concierto. Yo no puedo ir porque no puedo organizar mi trabajo con tanto adelanto. Estaría bien que ese concierto fuera el inicio del regreso de Héroes.

Te seguiré leyendo. Un abrazo!!