domingo, 8 de diciembre de 2013

Hermanas, Nuevo Teatro de La Felguera (Asturias)


El pasado 6 de diciembre se estrenó en Asturias, concretamente en el Nuevo Teatro de la localidad langreana de La Felguera, el montaje Hermanas dirigido por Carol López sobre un texto de su propia autoría. El elenco actoral estuvo formado por Amparo Larrañaga (Inés), María Pujalte (Irene), Marina San José (Ivonne), Amparo Fernández (Isabel), Alex (Chisco Amado) y Adrián Lamina.


Con un prólogo, dos actos y un epílogo, la obra pretende desarrollar las relaciones familiares a partir del hecho luctuoso de la muerte del esposo y padre, y un posterior reencuentro un año más tarde, con un epílogo que pretende abrir un nuevo futuro a partir de un nuevo hecho trágico.


Lo primero que voy a decir sobre este montaje es que me pareció de una endeblez fundamental, al partir de un texto (multipremiado en Cataluña también lo digo, en su versión en catalán escrita por la propia Carol López) de escaso interés narrativo, un texto que quiere ser tragicómico y no termina de ser ni lo uno ni lo otro y, a partir de ahí, las actrices y actores casi da igual lo que hagan porque tienen por delante la misión casi imposible de levantar una tonelada de peso a pulso.


Lo que no exculpa las interpretaciones que se vieron sobre el escenario, un tanto distantes, con falta de implicación emocional para dar un viso de verosimilitud al presunto carrusel sentimental en el que se embarcan sobre todo los personajes femeninos.


Imperdonable la interpretación del tema de Edith Piaf, Non, Je ne regrette rien, totalmente naufragada en medio del no se sabe muy bien su caldo de verdura o gazpacho edulcorado, en el que terminó convirtiéndose la función, con unos personajes reducidos a meros clichés inermes.



Por otro lado, en la obra se desperdician de una forma muy lamentable dos momentos en los que el dramatismo alcanza dos cotas reseñables, pero que se dejan caer como piedras a un abismo sin fondo para que la obra nunca termine de remontar el vuelo y naufrague lamentablemente en un mar de indiferencia, sin terminar de conmover por la parte más sentimentalmente dura, ni terminar de despertar la risa por la parte más cómica.

2 comentarios:

  1. jajaja, Alfredo en estado puro. Ya leo que te "lo pasaste pipa", qué pena no estar allí...seguro que saldría con la misma sensación.

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  2. Ay, mi querida Leonor ya te puedes imaginar voto fue la cosa y estoy convencido de que en este caso me hubieras vuelto a acompañar en el sentimiento (y no se entienda esto de forma luctuosa).

    Un abrazo!!

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