MUERTE EN EL OLVIDO
Yo sé que existo
porque tú me imaginas.
Soy alto porque tú me crees
alto, y limpio porque tú me miras
con buenos ojos,
con mirada limpia.
Tu pensamiento me hace
inteligente, y en tu sencilla
ternura, yo soy también sencillo
y bondadoso.
Pero si tú me olvidas
quedaré muerto sin que nadie
lo sepa. Verán viva
mi carne, pero será otro hombre
-oscuro, torpe, malo- el que la habita...
DONDE PONGO LA VIDA PONGO EL FUEGO
Donde pongo la vida pongo el fuego
de mi pasión volcada y sin salida.
Donde tengo el amor, toco la herida.
Donde dejo la fe, me pongo en juego.
Pongo en juego mi vida, y pierdo, y luego
vuelvo a empezar, sin vida, otra partida.
Perdida la de ayer, la de hoy perdida,
no me doy por vencido, y sigo y juego.
Lo que queda: un resto de esperanza.
Al siempre va. Mantengo mi postura.
Si sale nunca, la esperanza es muerte.
Si sale amor, la primavera avanza.
Pero nunca o amor, mi fe segura:
jamás o llanto, pero mi fe fuerte.
ESO LO EXPLICA TODO
Ni Dios es capaz de hacer el Universo en una semana.
No descansó el séptimo día.
Al séptimo día se cansó.
LLego desde el blog de Casandra y he ido directamente a los pst de poesía, -me encanta-, ha sido un agradable placer encontrarme con Ángel González.
ResponderEliminarSaludinos.
Gracias por la visita y el comentario, y espero que te animes a volver a pasar por aquí. A Ángel González lo tengo en mi lista de imprescindibles.
ResponderEliminarSaludos!!
Volví a "escucar" tu respuesta ;-)
ResponderEliminarMañana, --hoy ya-- voy a LLanes, espero que no llueva para traerme algún bello paisaje.
Chuches??, mejor no, gracias :-)